12 enero 2012

303 palos

303 palos



“Y entonces pensó que la vida era a veces
tan hermosa que no se parecía a la vida.”

Arturo Pérez Reverte




Seguía empeñado en cambiar
la banda sonora de su vida
y aunque una golondrina sola
no pueda hacer verano,
tampoco basta una adelfa amarga
para que todas las niñas
se arranquen las venas a bocados.

101 palos más 101 palos más otros 101 palos,
ya son 303 palos, no hay atajo sin trabajo.

Así estaban las cosas cuando decidió
que seguiría leyendo como cada mañana
su horóscopo en el Diario.
El problema era que él era capaz
de leer el del día anterior
o el del día siguiente,
pero lo que nunca podía
era leer el del propio día.
Y se cansó del horáculo.

303 palos. Es igual por delante que por detrás.
303 palos, uno tras otro sabría encajarlos.
303 palos, 303 palos…


Mientras se le levante el carayo
se irá quitando el sayo
en febrero, abril o mayo.
Y cuando llegue junio
se podrá poner de casco
al viejo mundo.


Suso Gago Ares

No hay comentarios:

Publicar un comentario